La achicoria es una planta herbácea perenne de origen común en Europa, África y Asia, donde se reproduce de manera silvestre. Pueden alcanzar hasta un metro. Es una planta cultivable en ambientes soleados.

La achicoria tiene un alto contenido en vitaminas y minerales, especialmente en ácido fólico y vitaminas A y K, contiene asimismo gran cantidad de fibra.

Sus hojas son verdes con el borde exterior rizado.

La achicoria de ensalada engloba a diversas plantas conocidas como:

El pan de azúcar: de hojas anchas, alargadas y de color verde amarillento, que se cosecha para consumirla en ensalada. Se parece más una lechuga que a una achicoria. Pese a ser una de las variedades más amargas, si se deja madurar más tiempo, el frío destruye la intibina, sustancia responsable de su amargor. Así se obtiene una verdura de sabor más suave con ligero gusto a nueces.

La achicoria de hojas o “catalogna”: se cultiva muy bien en todos los países mediterráneos, y su producción principal se sitúa en Italia. Son características sus hojas delgadas, dentadas, de color verde oscuro y con un sabor bastante amargo por ser la variedad más rica en intibina. También sobresale respecto al resto su contenido de provitamina A.

El cicorino: muy apreciada en Italia, donde es común su cultivo. Tiene las hojas en forma de roseta, de color rojo o verde, y es una verdura más propia de la primavera.

Se tiene conocimiento de ella desde al menos el Imperio Romano y se ha usado en emplaste para tratar eccemas y como infusión para tratar afecciones del aparato digestivo.

Con la achicoria se suelen elaborar platos como la Ensalada de salmón y escarola, escarola con aliño de ajo negro y pimentón o ensalada de escarola y arbequinas.

Como casi todos los vegetales es comúnmente empleada en ensaladas y cocinada en sopas y cremas.